Renault Dezir

Un concept que promete llegar al futuro



La casa matriz de Renault, de a poco, con un plan a largo plazo y con el tiempo suficiente para medir y testear los cambios que introducen, ha decidido transformar su estrategia de diseño de automóviles. Con la intención de afianzar la relación con sus usuarios, la empresa se propone generar autos para cada ciclo de la vida. Entonces, inspirándose en el nuevo lema «Drive the change», la Dirección de Diseño, a cargo de Laurens van den Acker, creará autos para cuando sus clientes se enamoren, descubran el mundo, creen una familia, trabajen, disfruten del ocio y lleguen a la edad de la sabiduría (obviamente un buscado eufemismo para decir edad adulta o sencillamente vejez).
El Renault Dezir es la primera creación en este sentido, y representa la edad del enamoramiento. Por tanto, y siempre siguiendo esta línea de concepción, se trata de un bi-plaza, pero de un solo asiento que con su forma de nido simboliza la unión, aunque cada lado del mismo haya sido tratado de diferente manera. Esto es, por ejemplo, el parte del conductor se tapizó en cuero liso mientras que la del acompañante se realizó acolchada, aunque del mismo material.
Hay muchas otras cosas que se podrían resaltar respecto de las ideas de este vehículo. Pero ya otros lo han realizado in extenso por lo que les dejamos el link al pie, en la fuente, por si les interesa.



Es cierto que se trata de un concept, lo que quiere decir que al momento de su salida al mercado puede venir con miles de modificaciones, e incluso no llegar nunca a estar en la calle. Pero lo que nos parece interesante remarcar es que desde su concepción, es claramente un auto muy europeo. Queremos decir, que salvo para las megalópolis, grandes urbes latinoamericanas, el auto está pensado para las dimensiones de los países y ciudades europeas y sus recursos. Por caso dos ejemplos. Es un auto enteramente eléctrico, con las limitaciones de recorrido que esto implica. Por tanto no imaginamos a una pareja enamorada de luna de miel recorriendo la patagonia y sus increíbles distancias en un vehículo de estas características. Segundo ejemplo: no tiene luneta trasera, por lo que la visión hacia atrás y a los costados del vehículo se realiza mediante cámaras que transmiten las imágenes hacia la cabina. De más está decir que un desperfecto en las mismas (técnico o por rotura) implica la pérdida total de visibilidad. Lo que en rutas sudamericanas conlleva cientos de kilómetros sin visión.
Son cosas a mejorar. Todavía está en etapa de experimentación.



Fuente: 16V