Que existen los corsets y los corpiños con push-up para aparentar más de lo que hay en realidad o resaltar lo que en realidad está ahí, no es ninguna novedad. Tampoco lo es el hecho de las fajas reductoras o las bombachas que agregan, levantan, ocultan o todo eso a la vez. O sea que la novedad de este corset y sus accesorios no pasa por lo que ofrece como beneficios. Lo increíble es el pésimo comercial que realizaron para venderlo. 5 minutos de lolas que suben y bajan de acuerdo al ajuste de un cordel. Pero esto no es todo. Lo más gracioso es el efecto de sonido utilizado para el sube y baja. Si se dedican a la comunicación pueden verlo como ejemplo de lo que no hay que hace en occidente, si bien en cierto que si en oriente lo hicieron por algo será. Aunque existe la tercer opción de que sea un mal comercial aquí y allá. Vaya uno a saber.
Fuente: geekologie
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