Es extraño el nombre que se le dan a determinadas cosas para posicionarlas y venderlas de una manera distinta. El Ego Compact Semi Submarino, es en rigor un extraño es en rigor una mezcla de burbuja subacuática con plataforma móvil. En realidad lo único que comparte con un submarino es que el módulo de conducción se encuentra debajo de la línea de superficie. Por lo demás es una amplia plataforma para tomar sol o disfrutar de la vista del mar desde la superficie, pero que además cumple la importante función de ser el lugar elegido para colocar dos inmensos flotares. En medio tiene una escalera que permite bajar a la burbuja que siempre está sumergida por diseño.
Puede alcanzar una velocidad de 4 nudos, y como no puede sumergirse ni emerger, o sea cambiar su posición relativa respecto de la línea de superficie, aprender a manejarlo es bastante sencillo ya que se conduce como un auto. Varios monitores LCD permiten saber el estado de las baterías (es un vehículo completamente eléctrico), la velocidad, y ver el compás de navegación y el reloj. El equipamiento se completa con una radio como en cualquier navío.
Si bien es cierto que tiene cosas bien pensadas como la facilidad para el manejo, también nos parece que realizar la entrada a puerto desde adentro del agua debe ser algo complicado. Un doble comando no le hubiera venido nada mal. Finalmente, no le aconsejamos que compre uno para nuestras ciudades rodeadas de ríos porque se perderá la mitad del show. Es un vehículo pensado para las cristalinas aguas del caribe o la polinesia donde pueden verse grandes cardúmenes con total claridad.
Fuente: raonhaje
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