Reinventando un clásico
Celebrando su 150 aniversario, TAG Heuer redefinió lo que ellos llaman un “Gran Clásico”, el TAG Carrera que fabrica desde 1964. La pieza clave de estos nuevos relojes está en su nombre, que viene del piñón oscilante interno, patentado en 1887 por Edouard Heuer, y que lo convierte en una pieza de alta relojería.
En TAG Heuer aseguran que: “El Cronómetro Carrera 1887 de TAG Heuer es la evolución al diseño del s.XXI del icono de 1964, enfatizando y celebrando más que nunca el minimalismo, la pureza, la legibilidad y la discreta elegancia del original. Es fiel al original en diseño y espíritu, pero su “motor” radicalmente nuevo, el Calibre 1887, lo convierte en un cronógrafo del 3er Milenio en términos de tamaño, calidad, rendimiento y precisión.”
Vibrando a 28.800 alternancias/hora, el movimiento del Calibre 1887, con 39 rubíes y unas dimensiones de 29,3 mm x 7,13 mm, consta de 320 componentes y cuenta con una reserva de marcha de 50 horas.
Fuente: TAG Heuer
25 mar 2010
TAG Heuer Carrera 1887
9:15
Editores: CTC Comunicación
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